A este chupito invito yo

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6/5/13

Quisiera ser un reloj para almacenar el tiempo que te debo.

Una vez, enamorada como sólo se puede estar con los imposibles, le pregunté al tiempo (en una cita que, como siempre, decidió acordar él todos los detalles) si no era molesto manejar la vida de tantas personas a su antojo. Recuerdo que se rio y me miró intentando borrar la sonrisa que parecía aflojar en él llamándome ingenua y me respondió que nunca había tenido una vocación más divertida. Se acercó a mí lentamente como parecían pasar las agujas del reloj cuando se ponía serio, y me preguntó en un susurro: ¿De verdad ves mi trabajo como algo aburrido? Manejo y decido todo a través de instantes que ni siquiera son visibles para los de tu especie. Decido cuándo es mucho y cuando es insuficiente, os apoyáis en mí (incluso cuando la mayoría de las veces solo traigo recuerdos que deberían ser borrados y esperanzas que nunca se cumplirán) para mitigar el dolor causante de hechos que me son ajenos.

Tras unos instantes reflexionando sonreí y le pregunté: ¿Y las personas que intentan huir de ti, que se niegan a obedecerte y deciden ir a contrarreloj siempre que pueden? 

Y su respuesta se me quedó clavada en la memoria como siempre que intentaba manejar una situación que era insostenible: "Esos, querida, son los peores. Se piensan que no son esclavos y ellos, con esas ansías de vuelo y libertad creyendo que manejan sus vidas se encarcelan ellos mismos con sus falsas esperanzas. Como haces tú, pequeña, cada vez que crees ser dueña de tu destino sin saber que siempre estaré yo detrás moviendo tus hilos"

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